En el camino aprendí,
que llegar alto no es crecer,
que mirar no siempre es observar,
que oír no es escuchar,
lamentarse no es sentir,
ni acostumbrarse es querer.
En el camino aprendí,
que andar solo no es soledad,
que cobardía no es paz,
que sonreír no es ser feliz y
que peor que mentir es silenciar la verdad.
En el camino aprendí,
que puede un sueño de amor
abrirse como una flor y
como esa flor morir,
pero en su breve existir
es todo aroma y color.
Cuando vayan mal las cosas,
como a veces suelen ir,
cuando tu camino
solo ofrezca cuestas que subir,
cuando tengas poco haber,
pero mucho que pagar,
cuando precises sonreír
aun teniendo que llorar,
cuando el cansancio te agobie
y no puedas ya seguir.
Descansar acaso debas,
pero nunca desistir,
cuando todo este peor,
es cuando mas debemos insistir.
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